2 cartas al Director de El Mercurio por eventual asociación SQM – Codelco – CORFO (y tabla adjunta)
Litio: ¿Dónde queda la competencia?
Estimado Señor Director,
Se acaba de anunciar un acuerdo entre Codelco y SQM para asociarse y extender la explotación del litio en el salar de Atacama hasta el año 2060. Sin embargo, este eventual contrato, probablemente el más grande que el estado de Chile, a través de Codelco, podría suscribir, con ingresos al erario fiscal, ya fuese por royalties o impuestos de primera categoría, que bien podrían rondar cifras anuales por US$ 5.000 millones, se perfeccionaría “por ventanilla”, sin competencia alguna de parte de terceros.
Un proceder así como país debería avergonzarnos. La manera correcta, dadas determinadas condiciones exigidas por el estado de Chile, sería licitar al mejor postor, pudiendo los Teslas, Exxon o Volkswagen de este mundo, poder participar, en abierta competencia con el actor incumbente SQM.
Chile no va a a salir exitosamente de su estado de anomia, falta de crecimiento, corrupción y mal uso de los recursos o activos fiscales si condiciones tan básicas de libre competencia se siguen vulnerando.
Es ridículo que para proveer, por ejemplo, de lápices a pasta BIC a la entidad estatal más pequeña, se exija realizar licitaciones de por medio, y, sin embargo, para contratos por billones de dólares, baste de unas reuniones en salones bien amueblados para poder proceder.
Ojalá despertemos como país, pues de otra manera vamos directo al precipicio.
Saluda atentamente a Ud.,
Manuel Cruzat Valdés
29 de diciembre 2023
Un craso error
Estimado Señor Director,
El controvertido acuerdo entre Codelco y SQM consta esencialmente de dos partes. Una primera, entre los años 2025 y 2030, que podríamos denominar “Lo comido por lo servido”: Codelco recibiría la utilidad de 210.000 toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE), para lo cual el mismo Codelco – CORFO compensarían a SQM con una cuota adicional “gratis” de 165.000 toneladas de LCE y otra de 135.000 toneladas de LCE donde en esta última compartirían la utilidad en partes iguales.
La segunda, “El valor del regalo”: entre los años 2031 y 2060, para una producción proyectada de 300.000 toneladas anuales de LCE, SQM percibiría como utilidad post royalties e impuestos de primera categoría aproximadamente el 20% del valor de venta de éstas, contra la entrega de las instalaciones de SQM en el salar y su asociado know-how. A US$ 20.000 la tonelada de LCE, un valor presente que superaría los US$ 12.000 millones menos el valor de la planta.
El regalo equivaldría a dos años de PGU …
Dificulto que alguna entidad estatal o gubernamental esté autorizada a entregar este tipo de regalos y comprometer el interés del país de esta manera, más allá de la recaudación fiscal asociada. Alguien va a tener que responder.
Este sería el caso de un activo estatal geopolíticamente estratégico que se mal administraría para cubrir un déficit financiero de una también mal gestionada Codelco que ha visto caer su calificación internacional.
Lo natural es volver a lo básico: hay tiempo para estudiar bien el potencial productivo de todo el salar de Atacama, para abrir uno o varios procesos competitivos – abiertos también a SQM – que económicamente dejen la mayor parte de su valor en el estado de Chile y que además éstos se condicionen en asegurar flujos básicos de pagos anuales, extraigan o no litio, para sus necesidades, entre otros elementos a considerar.
Continuar con el proceso actual constituiría un craso error y una señal de liviandad que como país no nos merecemos, más allá de hacer caridad con la plata de otros.
Manuel Cruzat Valdés
6 de enero 2024